
Esta entrada posiblemente sea mejor comprendida por aquellos que aman a la fiesta brava (como yo), si eres activista de Greenpeace o similar, mejor sáltatela......
El domingo pasado, al mirar la corrida en la Plaza México por televisión, se me ocurrieron varias reflexiones en torno a la fiesta brava. Quien sabe o "chanela" de toros (así se dice en idioma taurino) y/o quienes hemos tenido la oportunidad de conversar con toreros, bien sabemos que: 1. Los toros de lidia NO son unos inocentes animalitos. Han sido genéticamente manipulados y criados para acometer y asesinar con su fuerza y cuernos a quien ose molestarles. 2. Absolutamente TODOS los toreros sienten miedo antes de partir plaza, mismo que se les va quitando conforme avanza la lidia del toro y; 3. Que al final, la lidia de un toro bravo es cuestión de matar o morir.
Basados en las premisas anteriores, podemos hacer analogías entre la lidia de toros bravos y la vida cotidiana, la dignidad y el desempleo.
Cuando tenemos empleo e ingresos todo va bien pero, cuando los perdemos, nos sentimos como el torero en el patio de cuadrillas que espera con mucho miedo a lo desconocido. En tiempos de crisis global como la actual, se preve un toro muy grande y furioso al que hemos de lidiar. Cuando nos mentalizamos y enfrentamos al animal del desempleo con certeza, confianza y dignidad, el miedo se va quitando y vamos, sobre la marcha, planeando y ejecutando la mejor faena posible.
Lo verdaderamente importante aquí es que, como el torero, reconozcamos nuestro derecho a tener miedo pero no a paralizarnos por el mismo. El torero se hace toreando y hemos de mostrar, en estos momentos, los fundamentos que hemos aprendido en la escuela taurina de la vida. Hemos de entender que un torero tiene tardes buenas y malas (como nosotros) pero que, al final, seguramente saldrá por la puerta de toriles el toro de su consagración, hará una faena de maestro y saldrá en hombros por la puerta grande ante la aclamación popular.
Mientras tanto...vamos a los toros!!!! ¿porqué no?
4 comentarios:
C.K.:
Antes que nada déjame decirte que aunque no pertenezco a Greenpeace, las corridas de toros se me hacen actos muy crueles, y aun así me permití leer tu entrada de hoy... Me parece una analogía increíble, sobre todo la parte que homologas el miedo al salir a lidiar con el miedo a enfrentar día a día la situación actual de este país. Pero déjame decirte algo: yo, que aún tengo un empleo, también ando con el miedo de poder perderlo, y no tanto por no cuidarlo, sino por ser una víctima más de la crisis. En fin. Que tengas buena mitad de semana.
Querido Ciudadano,
En la última corrida los toros de Montecristo estuvieron muy bien presentados pero fueron mansos, poco pudieron hacer los toreros ante astados sin bravura, aunque un diestro corto oreja los demás no "encontraron chamba".
Pero no se quedaron quietos, Fernando Ochoa, homonónimo de un odontólogo ilustre por sus trapacerias de mozalbete, regaló un toró al que le hizo un faenon de antología con la muleta que le valió la vuelta al ruedo. La analogía que encuentro en esta situación es que Fernando Ochoa se fabricó una oportunidad, tuvo sus dos toros que no les pudo hacer nada y no se quedó quieto, buscó un toro que sabía que tenía la raza para dejarse torear y compró un ejemplar de Xajay, es decir que invirtió. Creo que en este entorno, de toros mansos que parecen osos, hay que crearse las oportunidades invirtiendo talento y si se tienen, recursos.
Atentamente,
Republicano
Hola! Yo nunca he ido a los toros, y en estos momentos tampoco estoy desempleada, pero se me hace muy buena tu comparación. Así como dices de ese miedo… ese miedo que a veces nos ataca sin darnos cuenta y que se empieza a convertir en miedo a la vida, a la incertidumbre, al querer ser mejor en lo que haces, a la competencia, al futuro, pero yo pienso que ese miedo se convierte en reto, que después te reirás de él.
Todo en esta vida es una lucha para poder hacer la mejor faena, ya que si no la haces te quedas con ese miedo y te hundes hasta perderte. Caray! Ahora si me inspiré…jeje
Y pues no estoy a favor ni en contra de los toros, por ello intentaré ir y conocer más sobre el tema… hasta pronto
Sólo se puede "torear" cuando se cuenta con las agallas de quien se atreve a arriesgarse y cuando se tiene un corazón grande de artista.A veces se sale airoso ono y a veces se triunfa pero siempre se muestra la fortaleza de espíritu. A ver metete tu...!!
Publicar un comentario