sábado, 14 de febrero de 2009

RESPONSABILIDAD MORAL

El día de ayer y en ocasión de una plática informal de restaurante con un buen amigo, se tocó el tema de qué tan responsable (o no) es (o debe ser) un jefe del bienestar y la felicidad de sus subordinados. Yo creo que sí, yo creo que sí puede hacer y mucho.
La felicidad y el bienestar de las personas en un gran porcentaje depende del adecuado y sabio manejo de una sola palabra: ELECCION. Es nuestra elección como queremos vivir, que fe queremos profesar, como hemos de cuidar nuestro cuerpo, de quienes nos hemos de rodear, que tipo de familia queremos tener y en donde y con quien hemos de trabajar. Es en este último punto en donde la persona, en su calidad de empleado, está en la posibilidad de controlar determinadas variables de su relación laboral pero otras no, como es el caso del tipo de jefe que la vida le ponga enfrente.
En mi opinión, un jefe debe ser como un justo juez del desempeño de sus subordinados pero, adicionalmente, debe ser un promotor y corresponsable en alguna medida del bienestar y felicidad de sus subordinados. Un jefe debe sacar lo mejor de cada colaborador y coadyuvar con este para que siempre esté en la posibilidad de dar más proporcionándole las herramientas necesarias para su CRECIMIENTO. Lo anterior, procurando un ambiente de camaradería, respeto y HUMANIDAD y comprendiendo que los problemas y situaciones que nuestros subordinados viven día con día inciden en su desempeño laboral. El acercamiento personal con nuestros colaboradores debe ser una obligación ineludible de cualquier líder, sobre todo, considerando que ellos (así como los jefes) pasan más horas del día en el trabajo que en su hogar.
Puede hablarse mucho de este tema pero no pretendo pontificar. Son solo algunas ideas aisladas y que considero básicas.
¿Como lo ves?

viernes, 13 de febrero de 2009

HOY NO PUEDO HABLAR....

Hoy no puedo hablar.....Solo puedo decir que nada tengo que decir......
Y no, no creas que tiene que ver con mi desempleo, por dramático que parezca dicho status y lo que conlleva no lo es todo en la vida. Hay mucho más que eso.
Simplemente tengo agotamiento mental y sentimental, estoy exhausto. ¿Razón? el inevitable encuentro con una realidad que te enseña que tus hijos no son de tu propiedad y que, tarde que temprano, están destinados a volar con alas propias. Te guste o no.
Aún cuando su edad sea temprana y el distanciamiento solo tome unas semanas te confronta, te machaca, te enseña. Te hace reflexionar acerca de lo que hiciste con tus padres o, lo que es peor, lo que dejaste de hacer. Te confronta también con la historia de tu propia vida, con las oportunidades de las que careciste y las que ahora das. ¿Hubiera cambiado tu propia historia?. Solo Dios sabe.
Mientras tanto, estoy exhausto y hoy no puedo hablar........

jueves, 12 de febrero de 2009

COYOACANEANDO

COYOACANEAR: dícese de la acción de disfrutar y deambular por Coyoacán y sus bellezas....

El día de ayer y con el pretexto de buscar un libro me dí a la tarea, cual neo Indiana Jones, de incursionar por los territorios del coyote. Qué delicioso y evocador contacto con aquello que pueda quedarme de bohemio, romántico y hippie.
A pesar de que Coyoacán ha soportado por casi dos años una violación a su intimidad en forma de obras de modernización y "embellecimiento", se defiende rabiosamente al conservar ese aire medio pueblerino y parroquial, culto e intelectual, quesadillero y cantinesco. Dejar pasar el tiempo en El Parnaso hojeando libros para redondear la faena con un expresso en su cafetería viendo pasar a la gente, te transporta a una dimensión muy especial y ajena al ajetreo y rutina que se vive a solo unas calles, a partir de Miguel Angel de Quevedo.
Mención especial merecen, si tienes tiempo y el presupuesto suficiente, los variados y sabrosos lugares que Coyoacán tiene para echar la copa o para comer. ¿Qué tal un chicharrón en salsa verde en El Morral o un mezcalito en Los Danzantes?.
Como quiera que sea y en la cabal medida de tus posibilidades, intenta acercarte a Coyoacán entre semana. Te va a encantar. Anda, inténtalo, ahora que puedes....

miércoles, 11 de febrero de 2009

¿OPIO DEL PUEBLO?

Al pueblo, pan y circo....

Estoy viendo el futbol y, como siempre y cuando menos hasta este momento, la selección mexicana va perdiendo el partido. La cuestión es que con el pretexto del futbol platiquemos un poco sobre aquellos legítimos distractores para la gente en época de crisis, ya colectiva, ya personal.

A mis amigos -colegas- desempleados les diría que tenemos el legítimo derecho de distraernos, hacer un alto en el camino y solazarnos con un buen partido de futbol o el deporte de tu elección. Es muy fácil: no te exige intelectualmente y hasta te sirve para tirar un poco de adrenalina y soltar dos o tres mentadas de madre. El conocido comunicador Javier Solórzano siempre y cada vez que puede ha dicho que "el futbol es lo más importante de lo menos importante" y qué razón tiene.
El futbol nos permite fortalecer nuestro sentido de identidad (ya con un club, ya con nuestra selección) y de pertenencia a algo. El futbol recrea y fortalece nuestro ánimo de competencia y esperanza, de sentido táctico y manejo de la estrategia, de toque fino a las situaciones de la vida que lo requieran, así como el choque leal y franco cuando el juego de la vida así lo demande.
¿Ya ven? el futbol y el desempleo son, por mucho, situaciones complementarias.
Al pueblo, pan y circo...

martes, 10 de febrero de 2009

NO TE LAS CREAS TODAS....

Aún en tus peores crisis de fe, no te las creas todas....

Seguramente estarás pensando: ¿de qué rayos habla este baquetón?. Muy fácil, de las noticias escritas, radiofónicas y de televisión. Diariamente, los de nuestro gremio estamos siendo agresivamente bombardeados con apocalípticas noticias sobre el desempleo y la crisis económica. Como ejemplo y solamente hoy, General Motors anunció que cortará 10,000 puestos de trabajo a nivel mundial durante 2009.
A este respecto me permito comentarte: 1. Que un alto porcentaje del contenido original y sostén de las grandes crisis económicas mundiales es PSICOLOGICO, nos dejamos arrastrar por el miedo y todo se paraliza, y; 2. Nuestro actual status (el tuyo y el mío) no nos permite -y por mucho- el "lujo" de quedarnos paralizados por el miedo.

Cuando te sientas abatido por la desesperanza imagina que el desempleo es como una pelea de campeonato a doce rounds y que en un combate tan largo y mientras no caigas noqueado, siempre habrá rounds que se pierden y otros que se ganan pero eso sí, siempre, el último round dura también tres minutos y siempre existirá la posibilidad de que ganemos la pelea con un golpe.

Mientras tanto haz lo tuyo, estudia a tu rival y HAZ TU PELEA que lo demás vendrá solo...